Capítulo 2435
Capítulo 2435
El Dragón y el Fénix
Tras echar un vistazo a su alrededor, Jaime confirmó que se encontraba dentro del reino secreto que había aparecido hace poco.
La energía espiritual del reino secreto era demasiado pura, lo que proporcionó a Jaime una sensación relajante por todo el cuerpo.
Sin embargo, su propia energía espiritual parecía estar reprimida por algo, por lo que no podía desatarla en absoluto.
—¿Podría deberse a este tatuaje de calavera de cristal? —Jaime murmuró e intentó arrancarse el trozo de piel afectado del pecho.
Justo cuando sus dedos estaban a punto de entrar en contacto con el tatuaje, la calavera de cristal emitió una luz brillante que apartó su mano.
—¡Oye! ¡Deberías considerarte afortunado de que me prestes tu cuerpo, jovencito! ¿Cómo te atreves a intentar deshacerte de mí?
La voz de un anciano sonó dentro de la cabeza de Jaime.
Jaime miró sorprendido a su alrededor y preguntó en voz alta:
—¿Quién eres? Muéstrate.
—¡Estoy en tu pecho! ¿Cómo es posible que no sepas quién soy después de haberte llevado mis huesos? Si no me hubieras quitado los huesos, ¡podría haber resucitado usando este reino secreto! Ahora mismo, sólo puedo tomar prestado tu cuerpo hasta que me encuentres lo que necesito. Después de eso, ¡dejaré tu cuerpo para siempre!
La voz del anciano volvió a sonar.
Fue entonces cuando Jaime recordó haber visto un mapa del tesoro encima de la calavera de cristal dentro de su Anillo de Almacenamiento.
Sin embargo, cuando comprobó su anillo de almacenamiento, se dio cuenta de que la calavera de cristal había desaparecido. No fue hasta que miró más de cerca el tatuaje de su pecho que se dio cuenta de que solía ser la calavera de cristal.
—¿Quién eres tú? Sólo tomé tus huesos por curiosidad. Además, ¡había un mapa del tesoro encima! —explicó Jaime.
—Quién soy no importa. De todos modos, no me conocerías, aunque te dijera mi nombre. Mira, lo único que tienes que hacer es localizar el tesoro según el mapa —replicó impaciente el anciano Renzo.
Jaime se quedó helado al escuchar aquello. Nunca esperó que el mapa del tesoro de la calavera de cristal condujera al reino secreto recién abierto.
Como Renzo se negó a dar más detalles, Jaime sabía que no debía seguir adelante. Sin embargo, no se encontraba en su mejor momento, y no podía evitar una sensación de preocupación y duda sobre lo que le esperaba.
—¿Eres tú la razón por la que no puedo utilizar toda mi energía espiritual? —preguntó Jaime.
—¿Qué tiene eso que ver conmigo? No puedes utilizar tu energía espiritual porque la Ley Celestial está presente en este reino secreto. El Poder de los Dragones y el Fénix dentro de ti aún no se ha fusionado por completo. Por eso estás restringido por la Ley Celestial —respondió Renzo.
—¿El poder de los dragones y el fénix? —Jaime frunció el ceño confundido, sólo para recordar el fénix que estaba dentro de su cuerpo antes de desmayarse.
«¡Sólo tengo el Poder de los Dragones dentro de mí! ¿Desde cuándo tengo también el poder de un fénix? Un momento... ¿Podría ser Feenix, a quien encontré en la Montaña de la Bestia Demoníaca? Pero no tenía ningún poder nuevo en mi cuerpo cuando Feenix y yo nos separamos, así que ¿de dónde viene este nuevo poder?».
Como si Renzo hubiera percibido la confusión de Jaime, añadió:
—¡El poder de los Dragones y el Fénix es el resultado de la fusión del Poder de los Dragones con el Poder de los Fénix! No me digas que vas a huir de tu responsabilidad después de jugar con ella.
Jaime se quedó aún más confundido tras escuchar lo que dijo el anciano. Exclusive content © by Nô(v)el/Dr/ama.Org.
«¿Eh? No creo que haya hecho nada sexual con Feenix, aunque... Espera... Tuve un sueño muy bonito mientras estuve inconsciente unos días. Pensé que lo hacía con Evangelina, pero luego descubrí que no era ella, así que asumí que era sólo un sueño. Ahora que lo pienso, es muy posible que lo hiciera con Feenix... ¡Debo haber desarrollado el Poder de los Dragones y Fénix después de hacerlo con ella! Tal vez los dos poderes no tuvieron tiempo suficiente para fusionarse porque fue algo muy reciente».
La mera idea de tener sexo con Feenix mientras estaba inconsciente hacía que Jaime se sintiera demasiado incómodo.